SEMINARIO
DIOCESANO SANTO TOMÁS DE AQUINO
EXÉGESIS
BÍBLICA
LC
1, 39-56
PRESENTADO
POR:
CAMILO
ANDRÉS MENDOZA OSORIO
III
DE TEOLOGÍA
SINÓPTICOS
PRESENTADO
A:
ROSEMARY
CASTAÑEDA M. O.P
SANTA
ROSA DE OSOS, 18 DE SEPTIEMBRE DE 2012
Lc
1, 39- 56[1]
39. En aquellos días, se levantó María y se
fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá;
40. entró en casa de Zacarías y saludó a
Isabel.
41. Y sucedió que, en cuanto oyó Isabel el
saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó llena de
Espíritu Santo;
42. y exclamando con gran voz, dijo: «Bendita
tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno;
43. y ¿de dónde a mí que la madre de mi Señor
venga a mí?
44. Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de
tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno.
45. ¡Feliz la que ha creído que se cumplirían
las cosas que le fueron dichas de parte del Señor!»
46. Y dijo María: «Engrandece mi alma al Señor
47. y mi espíritu se alegra en Dios mi
salvador
48. porque ha puesto los ojos en la humildad
de su esclava, por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán
bienaventurada,
49. porque ha hecho en mi favor maravillas el
Poderoso, Santo es su nombre
50. y su misericordia alcanza de generación en
generación a los que le temen.
51. Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a
los que son soberbios en su propio corazón.
52. Derribó a los potentados de sus tronos y
exaltó a los humildes.
53. A los hambrientos colmó de bienes y
despidió a los ricos sin nada.
54. Acogió a Israel, su siervo, acordándose de
la misericordia
55. - como había anunciado a nuestros padres -
en favor de Abraham y de su linaje por los siglos.»
56. María permaneció con ella unos tres meses,
y se volvió a su casa.
Traducción tomada de la
Biblia de Jerusalén
Para
entrar de una manera más sistemática y organizada en la exégesis de este texto
lucano, tengamos presente la siguiente secuencia:
- Situación
inicial (vv. 39-40)
- Reacción
del niño (v. 41)
- Reacción
de Isabel (vv. 42-45)
- Primera
parte del himno de María: alabanzas por los cambios que se están dando (vv.
46-50)
- Segunda
parte del himno: ve al futuro, donde el Mesías es quién la inaugura (vv. 51-55)
- Regreso
de María a su casa (56)
Dos
mujeres en embarazo (una estéril y otra virgen), dos niños concebidos de manera
particular por la acción del Espíritu Santo. Gracias a este encuentro, la madre
del Mesías comprende de manera más profunda, el mensaje de salvación que ha recibido
de Dios.
Este
relato, que pertenece a la infancia de Jesús, no lo podemos leer y mucho menos
estudiar de cualquier manera; no es un relato que debe entrar sólo por las vías
de la razón, si no también por las sendas del corazón. La riqueza que
encontramos en los textos bíblicos, no sólo se limitan a conocimientos
históricos, pensado que es la única manera de demostrar la existencia de Jesús
histórico. ¿De que nos sirve demostrar que Jesús existió como hombre y no como
Dios? ¿Dónde está la novedad? Debemos acoger el mensaje de manera integral, de
tal manera, que podamos ver la belleza que Dios pone en labios de Lucas.
Qué
interesante este pensamiento con respecto al estudio bíblico:
“Si
fuéramos capaces de percibir... los secretos de Dios transmitidos en los textos
de la Biblia, a la manera de los músicos, los pintores y los poetas, su mensaje
conmovería el corazón de todo hombre sobre la tierra y Dios se haría oír en los
cantos de alegría, en las visiones de la belleza y en la poesía orante de la
piedad y del amor ... Pero, ¿qué hemos hecho nosotros los teólogos, al haber
elegido con el paso de los siglos un lenguaje cada vez más racional y, al mismo
tiempo, más materialista, para la
interpretar los símbolos de la fe ... ?”.[2]
El
Evangelio de Lucas, es por excelencia el Evangelio mariano, y esto lo vemos en
este texto que vamos a estudiar. Lucas nos da la primera presentación de María,
madre de Jesús.
Esta
presentación que Lucas ofrece acerca de María, es una de las grandes novedades
que encontramos en los Sinópticos. Ya que de María se habla muy poco en el
Nuevo Testamento, y mucho más cuando se escribe en medio de una cultura machista.
Al
momento de la redacción de este Evangelio, el autor sagrado sabe muy bien donde
ubicar la figura de María, de tal manera que sin ser ella más o menos que su
Hijo o que el resto de los personajes de este libro, la presenta como la gran
portadora del verbo encarnado, la gran centinela del Evangelio.
Antes
de entrar en la materia de estudio, nos tenemos que hacer la siguiente
pregunta: ¿es verídico que la alabanza de María, el Magníficat, es realmente de
ella? Este interrogante nos lleva a profundizar un poco sobre los cánticos
en la obra lucana.
- Vamos
con lo primero.
Raymond Edward Brown, nos dice que
algunas frases del Magníficat cuadran
mejor en Isabel que el María. Miremos por qué:
v. 48: humilde condición de su esclava. ¿Su condición de
virgen es una humillación ante los hombres? Esta encaja mejor en la realidad de
Isabel, que siendo estéril, siente vergüenza ante los hombres (v 25)
v. 49: ha hecho en mí favor
maravillas el Poderoso. Es similar a el
poderoso ha hecho tanto por mí (v 58)
Son sólo ejemplos que no son exactos
al momento de ubicarlos en cualquiera de las dos mujeres. Sólo podemos decir,
que el magníficat es aplicable a los oprimidos de Israel, pero como dice la
Pontificia Comisión Bíblica: el Magnífica
tiene que ser atribuido a María y no a Isabel. [3]
¿Por qué el cántico de María está dentro
de la visitación y no antes o después? Esto nos da pie a pensar que este
cántico fue puesto de manera posterior al momento de la redacción. De todas
maneras, creamos por el momento, que el autor nos da a entender la necesidad de
la respuesta de María al cántico de Isabel, porque se debe dejar claro la
supremacía de Jesús frente a Juan Bautista.
-
Vamos
con lo segundo
Al estudiar este cántico (María), se
debe tener presente los demás cánticos: el benedictus (1, 67-79,
Zacarías) el Gloria (2, 13-14,) y el Nunc dimittis (2,
28-32Simeón). El Gloria, es su corto contenido, es mencionado con personajes no
mencionados antes en el relato bíblico.
En diferentes estudios bíblicos,
encontramos diversidad a la hora de definir su composición:
-
Fueron
compuestos por Lucas al mismo tiempo que el conjunto del relato: es difícil
creerlo al momento de encajarlo en su contexto actual. Es más, si se hubiesen
omitido, creeríamos que nadie se hubiese dado cuenta, porque en el antes y en
el después sigue siendo la misma esencia del mensaje: pasar del v. 38 al v. 57
-
Fueron
compuestos por Lc y añadidos posteriormente por Lucas a un relato ya existente.
-
Eran
prelucanos y fueron añadidos por Lucas a un relato ya existente.
Nos centraremos un poco más en el
estudio del Magnífica, que es el texto que más nos importa por el momento:
Sin duda alguna, este cántico tiene es
su esquema muchos aspectos del género conocido como himno de alabanza. Aquí
algunos del salterio: salmos 8 ,19, 29, 33, 100.
CONEXIÓN DEL MAGNIFICA CON EL ANTIGUO TESTAMENTO
46 b Y dijo María:
«Engrandece mi alma al Señor
47 se
alegra mi espíritu en Dios mi Salvador
-
Sal
35, 9: y yo me alegraré con el Señor gozando de su victoria
-
1
Sm 2, 1-2 (cántico de Ana): mi corazón se regocija por el Señor, mi poder se
exalta por Dios, porque celebro tu
salvación
-
Hab
3,18 (cántico de Habacuc): yo festejaré al Señor gozando con mi Dios Salvador
48 a. Porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava
-
1
Sm 1,11 (Ana pide un hijo): Señor de los ejércitos, si te fijas en la
humillación de tu sierva
-
Gn
29,32: porque el Señor ha visto mi aflicción
-
Esd
9, 45: Dios escuchó a su esclava y se fijó en su humillación y tuvo en cuenta
mi vergüenza y me dio un hijo
48 b por eso desde ahora
todas las generaciones me llamarán bienaventurada
-
Gn
30, 13: ¡qué felicidad! Las mujeres me felicitarán
49. porque ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso
-
Dt
10, 21: Él será tu Dios, pues él hizo tanto por ti
-
Sof
3, 17: el Señor tu Dios es dentro de ti, el Poderoso te salvará.
49 b Santo es su nombre
-
Sal
111,9: su nombre es Santo y temible
50 su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen.
-
Sal
103, 17: pero la misericordia del Señor dura por siempre con sus fieles
51 desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a
los que son soberbios en su propio corazón,
52. derribó a los potentados de sus tronos y
exaltó a los humildes.
53. A los hambrientos colmó de bienes y despidió
a los ricos sin nada.
-
1
Sm 2, 7-8:
El Señor da la pobreza y
la riqueza, el Señor humilla y enaltece. El levanta del polvo al desvalido,
alza de la basura al pobre, para hacer que se siente entre los príncipes y que
herede un trono glorioso
-
Sal
89, 11: Tú traspasaste y destrozaste a Rahab, tu brazo potente desbarató al
enemigo
-
Eclo
10, 14: Dios derribó del trono a los soberbios y sentó sobre él a los oprimidos
-
Job
12, 19: trastorna a los nobles
-
Ez
21, 31: habiendo reducido los soberbios a la humillación y habiendo exaltado a
los humildes
-
Sal
107, 9: calmó el ansia de los sedientos y a los hambrientos los colmó de
bienes.
54. Acogió
a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia
55. - como había anunciado a nuestros padres - en favor de Abraham
y de su linaje por los siglos.»
56. María permaneció con ella unos tres meses, y se volvió a su
casa.
- Is 41,
8-9: Tú, Israel, siervo mío; Jacob, mi elegido; estirpe de Abrahán, mi amigo.
Tú, a quien cogí en los confines del orbe
- Sal 98,
3: se acordó de su misericordia para con Jacob y de su fidelidad para con la
casa de Israel
- Miq 7,
20: así serás fiel a Jacob y leal a Israel como lo prometiste en el pasado a
nuestros padres
- 2 Sm
22,51: mostraste su misericordia a tu ungido, a David y su linaje por siempre
SITUACIÓN INICIAL vv. 39-40
Comienza
la escena con el verbo άναστδσ. A continuación, nos habla Lucas de la prontitud que María tiene para ir a casa
de Zacarías. En el texto original, encontramos la traducción: a toda prisa. Esta prisa no se puede
traducir desde una dimensión psicológica, afirmando que María era una persona
desesperada o acelerada. La prisa que María lleva es la respuesta inmediata que
da al mensaje del Ángel Gabriel.
El
pueblo de las montañas mencionado por Lucas, hoy en día se identifica más
exactamente con Ain Karin (significa fuente
de viñedo), seis kilómetros al oeste de Jerusalén. Lucas ya ha indicado (1,23) que Zacarías no
vivía en Jerusalén, sólo la quinta parte de los sacerdotes vivían allá, ya que
el resto prefería vivir en Judea (Neh 11,3; 1 Mac 2,1).
Si
nos vamos a la interpretación literal-geográfica del recorrido de María,
entonces ella tuvo que andar aproximadamente tres días, desde las colinas de
Galilea, pasando por la llanura de Esdrelón y las montañas de Samaría, hasta la
sierra de Judea. Esto se convierte en todo un problema, ya que nos queda una
pregunta por hacer: ¿será posible que María ya en embarazo, caminó dos o tres
días a casa de zacarías? ¿Dónde estaba ubicada realmente Isabel? Hasta ahora no
encontramos un dato exacto, pero puede haber la posibilidad, de que Lucas no
tenía claro la cercanía o la lejanía que había entre Galilea y Jerusalén. Sin
embargo, aunque sea un problema sólo de geografía y no de la esencia del
mensaje, terminemos esta parte con un comentario de un sobresaliente biblista
internacional: “yo diría que Lucas sólo sabía que los padres de Juan Bautista
eran de estirpe sacerdotal y que muchos sacerdotes vivían en Judea, cerca de
Jerusalén.”[4]
La
visitación comienza estrictamente con el v. 40. Ya en el v. 24 se nos hablaba
del ocultamiento de Isabel, pero con esta visita de María, se da por terminada
toda la clandestinidad de su embarazo.
Es
tan sublime este encuentro, que el gran acontecimiento tiene como realidad de
fondo, el recibimiento que el Antiguo Testamento (Juan) le da con gran alegría
al Nuevo Testamento (Jesús). Es un hecho
donde Dios se vale de dos realidades presentes que se encuentran: el antiguo
Israel oprimido y esclavizado y el nuevo Israel redimido y liberado.
De
otro lado, es importante y significativo el silencio del viaje que María
emprende; es una actitud de reflexión y meditación que muestran a María como
una mujer que asume su responsabilidad con obediencia y humildad.
- REACCIÓN DEL NIÑO V. 41
El
saludo de María no tiene nada de anormal, de sobrenatural o extraño; aquí lo
realmente grandioso es la relación que Isabel hace de la reacción del niño (πήδηξε)
con el saludo de su prima María. Es la alegría de Isabel al escuchar la voz de
su pariente, la que hace que el niño brinque en su vientre. Aquí podríamos
hacer referencia a una tercera mujer, Rebeca, que siendo del Antiguo
Testamento, posee una condición limitada para concebir hijos (Gen 25, 21),
igual que Isabel (v 36), pero que junto con María, sería un parto bastante
incomprensible. Esta relación con Rebeca nos dice que Dios conduce la historia
de los hombres desde antes de su nacimiento (Jer 1,5)
La
bendición y la paz llega a la casa de Isabel desde el mismo momento en que
María la saluda; así comienza Jesús a ofrecer por primera vez la salud
espiritual y física. No sólo es tarea de María ser la portadora de la salud,
sino todos aquellos que le sigan (10, 5ss). En este pequeño trozo del evangelio
se ve reflejado lo que después de la resurrección se convertirá en el
cumplimiento de dicha profecía.
Viendo
el texto de una manera más racional, detalles como el salto de Juan en el
vientre de Isabel, más que el resultado de la interacción que hay entre las dos
mujeres, es un fragmento que también Lucas podría haber puesto desde su
experiencia médica (Col 4,14), para dejar claro quién es el autor de dicho
Evangelio.
La
ultima parte de este versículo, nos dice que Isabel quedó llena del Espíritu Santo. En 1, 15 el ángel promete que Juan
Bautista se llenará con el Espíritu Santo
ya desde el vientre de su madre y este reconocimiento de Jesús demuestra
que la promesa ya se ha cumplido.
El
embarazo de María es un embarazo de visible profecía, aún más de la gran y más
esperada profecía, donde su presencia llena de la divinidad a aquel que ha
sentido su presencia y se convierte de profetizado a profeta, Juan. Cada una se
da cuenta, de las grandes maravillas que Dios ha hecho en la otra, de tal
manera que todas dos cantan las alabanzas del Señor: vv 42-45; 46-54. La
intención de Lucas, siendo él un interesado por la figura de la mujer en su
evangelio, es de una teología cristocéntrica muy profunda: las dos mujeres
junto con el salto de Juan, ensalzan a Dios por la encarnación del Verbo.
- REACCIÓN DE ISABEL. VV 42-45
Lucas
en su afán de expresar este gozo sin límites, se convierte casi en tautológico
(el mismo mensaje pero en distintas palabras). Este es uno de tantos relatos,
que si leemos el evangelio de Lucas de manera continua, nos surgiría una
pregunta: ¿Por qué no aparece José en este relato bíblico? El hecho de que no
se mencione a José en la escena de la visitación, confirma que Lucas pensaba
realmente en una concepción virginal al escribir 1, 26-38.
Con
relación al Antiguo Testamento, una bendición semejante se ve en cánticos que
alaban a mujeres de la historia israelita. Así como Isabel, llena del Espíritu
profético: Bendita tú entre las mujeres, así
también la profetiza Débora clama: Bendita
seas, Jael, entre las mujeres (Jue 5,24) (Jdt 12,18)[5]
42- Isabel habla con gran voz.
Ella habla de una manera extasiada emocionalmente, en una forma litúrgica y
solemne, como cantaban los levitas delante del arca de la alianza (1 Cro 16, 4).
Hablar con gran voz, es fruto de la experiencia que ella tiene al haber
recibido la alegría mesiánica, es decir, el encuentro personal con el verbo
encarnado.
Bendita tú entre las
mujeres. Hagamos a continuación un pequeño análisis gramatical de
la palabra bendición, el cual
la encontramos en dos sentidos dentro de la Biblia. Esta es la distinción: una
puede llamarse participial y la otra adjetiva:
- Participio
pasivo: hebreo baruk, griego eulogetos o eulogemenos, latín benedictus,
castellano bendito.
- Adjetivo:
hebreo asre, griego makarios, latín beatus, castellano feliz,
dichoso o bendito
Nota:
los
signos que traen algunas palabras,
especialmente las de hebreo, el computador no me las permite hacer. Sin
embargo, yo tengo el texto original.
Las
frases del NT en que se emplean adjetivos, por ejemplo, las bienaventuranzas,
son llamadas macarismos (del griego makarios). Estas no otorgan una bendición, sino que
reconocen un estado previo de felicidad o bendición. Son una proclamación que
viene a significar, que la alegría escatológica ha llegado. Se encuentran
macarismos en Lc 1,45.48., pero en este pasaje que estamos trabajando, Lucas
dice eulogemenos. Podemos ver, que se
trata entonces, de un sentido participial: el bendito se dirige propiamente a Dios (V 32) que tiene que ser
bendecido por los seres humanos[6].
Por
lo general, la bendición es un deseo del hombre que implora a Dios para que lo
acoja en su amor (Mt 7, 7-11; 1 Cro 4, 9-10). Pero en este caso, el Espíritu
Santo, permite que Isabel reconozca la bendición que ha sido previamente
entregada a María. Si nos remitimos al Antiguo Testamento, nos damos cuenta de
que María no ha sido la única mujer bienaventurada por Dios que encontramos en
la biblia (Jue 5, 24; Jdt 13, 18). Podría afirmar arbitrariamente que María,
aun siendo bendecida por Dios de manera excelente, no lo ha sido más que
ninguna otra mujer.
Bendito el fruto de tu seno.
También
aquí se emplea la forma participial eulogemenos.
En Jdt 13, 18 vemos una alteración entre eulogetos y eulogemenos en los versos paralelos: bendita tú…entre todas las mujeres de la
tierra y bendito es el señor Dios. La expresión fruto del vientre es una hebraísmo (Gn 30, 2; Lam 2, 20)
43- y ¿de dónde a mí que la madre de mi
Señor venga a mí? Isabel
comprende la visita de María como una distinción. La traducción griega del AT
reproducía el nombre de Dios Yahveh de la Biblia hebrea con la palabra kyrios (Señor). Por esta razón, cuando
Isabel saluda a María como “Madre de mi Señor”, está reconociendo el origen
divino del niño Jesús[7]. Tanto en el Evangelio
(20, 41-44) como en Hechos (2, 34) Lucas emplea en Sal 110, 1: Dijo el Señor a mi Señor, para demostrar
que Jesús es el Mesías. [8]
Complementemos
nuestro estudio en esta parte del relato con otra relación que tiene la Visitación con el AT. 2 Sam nos dice que
David quería trasladar el Arca de Baalá de Judá hasta Jerusalén. Vemos que en
el trasfondo de este texto, hay algo (2 Sam 6, 5) en común con el de la Visitación: la alegría de ser portador
de una realidad Divina que salva (arca de la alianza) (Lc 1, 41). Sin embargo,
más adelante el texto nos dice que David no se atrevía a llevar el Arca a su
casa, a causa de la muerte de Uzá. Exclamó: ¿Quién soy para que me visite el Arca de mi Señor? (6, 9). Es
evidente la semejanza con la pregunta de Isabel, y más, cuando por fruto de
esta pregunta, el Arca se queda tres meses en la casa de Obedebom; lo mismo que
María se quedó con Isabel unos tres meses (1, 56). Esta relación, nos lleva a
pensar, que Lucas cree que María es el Arca de la Alianza.
44- Porque, apenas llegó a mis oídos la voz
de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno.
El
Saludo de María tiene como respuesta los jubilosos saltos del niño. Este hecho
traspasa el júbilo del tiempo mesiánico de salvación, que el profeta había
descrito con estas palabras: saldréis y
saltaréis como terneros que salen del establo (Mal 3, 20). El tiempo de
salvación, es tiempo de júbilo, como la
promesa hecha a Zacarías en 1, 14: tendrás
gozo y alegría.
45- ¡Feliz
la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del
Señor!»
Isabel
proclama a María bienaventurada. El genero literario macarismos tiene un lugar en la literatura sapiencial. Tiene la
función de indicar cuál es el camino correcto en la vida (6, 20-22). A María se
le glorifica ya desde este mismo momento, porque ha escogido el camino de la fe
(1, 38). Esto macarismos los encontramos con más frecuencia en Mateo y Lucas.
PRIMERA PARTE DEL HIMNO DE
MARÍA: ALABANZAS POR LOS CAMBIOS QUE SE ESTÁN DANDO (VV. 46-50)
El
magníficat es el primero de los cuatro himnos que caracterizan la narración
lucana de la niñez de Jesús.
De
los tres cánticos atribuidos a seres humanos en el relato lucano de la
infancia, el Benedictus describe la reacción de la comunidad de los oprimidos,
pero nunca menciona al orante en primera persona singular; el Nunc dimittis
describe la reacción del orante, y el Magníficat
combina ambos aspecto: su reacción
en primera persona singular y la reacción de la comunidad oprimida. Así
encontramos en el Magníficat, un sentido hímnico individual y comunitario.
46 - 47 Y
dijo María: «Engrandece mi alma al Señor[9]
y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador.
La
invitación a la alabanza no está redactada en imperativo, sino en una forma más
suave. Cuando María expresa su propia alabanza a Dios, está invitando al mismo
tiempo a todos a unirse a ella. Este cántico, como ya lo habíamos dicho, es
inspirado en el cántico de Ana (1 Sm 2, 1-10).
48- porque
ha puesto los ojos en la humildad de su esclava, por eso desde ahora todas las
generaciones me llamarán bienaventurada.
Lucas,
al componer este versículo, empleó el vocabulario que ya había aplicado a María en el v. 38
(esclava) y en el 45 (dichosa), vocabulario que encajaba perfectamente con la
imagen de mujeres que entonaron himnos, inspirado en Ana y Judit.
Cuando
Lucas pone en labios de María su humildad,
el evangelista no quiere solamente darle importancia a una cualidad
particular de María, sino a su condición entre las mujeres (v. 27). Ahora no
sólo todas las mujeres, sino todas las generaciones llamarán dichosa a María,
porque su hijo traerá la salvación a todas las generaciones.
Dios
al mirar la humilde condición de su esclava, recuerda que alguna vez vio la
miseria de su pueblo en Egipto, poniéndose entonces en marcha para liberar a
Israel de su esclavitud (Ex 3, 7-8)
La
alabanza que encontramos en v. 48b se refiere ahora a la cantautora misma. A
través de la alabanza a ella misma, alaba lo que Dios ha llevado a cabo en
ella.
49- porque
ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso, Santo es su nombre
En
el A.T, como atestigua Sof 3,17, Dios manifiesta su poder para salvar a Israel.
La confesión que hace María de Dios es una anticipación del principio
evangélico: lo que es imposible para los
hombres, es posible para Dios. (1, 38).
Encontramos
otra confesión: Santo es su nombre. La
santidad del nombre de Dios está relacionada con su fuerza. El nombre de Dios es el modo con que Dios
se da a conocer a los seres humanos. Dios santifica su nombre con los actos de
poder, que hacen que los hombres reconozcan su santidad. En el Padrenuestro, santificado sea tu nombre, es paralelo a
hágase tu voluntad. Esta idea del A.T
(Sal 111, 9) tiene su origen en que el Dios de la alianza se presenta como
santo (Lv 11, 44-45).
María
supo que su hijo sería la encarnación de la santidad de Dios, dado que Jesús
había sido concebido cuando el Espíritu Santo de Dios descendió sobre ella, el
niño que iba a nacer sería llamando santo
(1,35).
50- y su misericordia alcanza de generación en
generación a los que le temen.
El
magníficat es una referencia a la misericordia inagotable de Dios para con los
que le temen y resonancia del pensamiento israelita frente a la compasión de
Dios.
A
ella le había dicho el ángel que no tuviera miedo (1, 30) y que el reino sobre
el que iba a reinar su hijo no tendría fin (1, 33), de manera que la nueva
alianza en Jesús es un ejemplo de la misericordia de Dios de generación en
generación.
SEGUNDA PARTE DEL HIMNO: VE
AL FUTURO, DONDE EL MESÍAS ES QUIÉN LA INAUGURA (VV. 51-55)
51- Desplegó
la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón.
La
narración hímnica explica en siete oraciones en qué consiste concretamente la
misericordia de Dios y su significado para el aquí y el ahora. El número 7 es simbólico: la plenitud. Señala
aquí la obra omnipotente de Dios.
Cuando
se habla de su brazo, se refiere a un
semitismo, frecuente sobre todo cuando se alude a las hazañas que realizó Dios
al librar a Israel de Egipto (Dt 4, 34).
Soberbios (literalmente
arrogantes) son aquellos que miran a
los demás por encima de los hombros, ya que no miran hacia Dios (Is 13, 11). La
capacidad de pensar, se sitúa en el corazón (1 Cr 29, 18), de esa manera se
convierte en la sede del orgullo (Abd 3).
52- Derribó a los potentados de sus tronos y
exaltó a los humildes.
Los
potentados o príncipes sería rivales de Dios, el único soberado y rey de todo
que encontramos en 1 Tim 6,15. Lucas ha llamado ya a Dios poderoso en el v. 49.
53- A
los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada.
En
la Biblia es común que a los ricos (soberbios) se les quitaran sus riquezas
(Job 15,39; Jr 17, 11). Pero la imagen de vacío
(sin nada) en vez del empobrecimiento, se debe a la mención que se hace en
la frase anterior de los hambrientos que quedan colmados. Una imagen de esto es
la parábola de Lc 20, 10-11: los que van a cobrar la renta a los labradores
malvados son despedidos con las manos vacías.
La
pobreza y el hambre de los oprimidos son en este texto, ante todo espiritual;
sin embargo no debemos olvidar las realidades físicas con que se enfrentaban
los primitivos cristianos. Los primeros discípulos de Jesús fueron galileos.
Galilea se empobrecía por el abandono de los propietarios. La pobreza era real
entre los cristianos de Jerusalén. Prueba de esto es que compartían voluntariamente
sus bienes (Hch 2, 44-45; 4, 34-35 y 5, 1-2) y que Pablo insistía en la
necesidad de ayudar (Gál 2, 10; 1 Cor 16, 1-4; Rom 15, 25-26).
En
esta parte de nuestro estudio bíblico, cabe resaltar que los hambrientos (pobres, necesitados, humildes)
hacen parte de la referencia que el Magnífica
nos da de María: su situación actual que describe a Israel, sobre todo al resto
pobre y oprimido.
María
sin duda alguna, cuando se alegra porque Dios hará justicia, está hablando en
nombre de todos los anawim[10],
humillados y hambrientos. Lucas coloca a María como portavoz de los anawim, teniendo un completo
conocimiento del relato veterotestamentario de Ana, la madre de Samuel, esclava
del Señor que cantó un himno de los anawim
(1Sm 1, 11; 2, 1-10). Vemos que la concordancia entre María y Ana se continúa
en el cap 2 cuando María lleva a Jesús al templo, lo mismo que Ana llevó a Samuel al templo de
Silo.
Concluyamos
esta parte: los anawim cristianos, cuya
voz ha resonado en el cuerpo del himno, se identifican a sí mismos con el resto
de Israel.
54- 55 Acogió a Israel, su siervo, acordándose
de la misericordia - como había anunciado a nuestros padres - en favor de
Abraham y de su linaje por los siglos.»
Auxilia
(acoger) también se aplica al Dios que toma a Israel su siervo desde los
confines de la tierra (Is 41, 8-9).
Con
el concepto siervo se retoma la forma con la que María se describe a sí misma
como sierva o esclava del Señor. Lo
que Dios ha realizado hace tiempo en Israel, lo realiza ahora en María. La obra
de Dios en Israel fue la salvación del pobre y
humillado siervo, su liberación de la esclavitud. Es ahora lo que sucede
con la sierva de Dios, María. La historia de su elección termina en la historia
de su pueblo, y la historia de su pueblo
llega a la perfección en su propia historia.
La
gran hora de María es también la gran hora de su pueblo. En María está
representado el pueblo de Dios. La
promesa de la salud se hizo a Abraham y a su descendencia (Gén 12,2).
Abraham recibió la promesa, María toma posesión de la realización, el pueblo de
Dios recibirá los frutos.
56- María permaneció con ella unos tres
meses, y se volvió a su casa.
La
cronología (tres meses) está relacionada con el embarazo de Isabel, y este dato
hay que añadirlo al de los seis meses de 1, 26.36. El cálculo se hace
probablemente sobre un embarazo que dura diez meses, de manera que María deja a
Isabel precisamente antes del nacimiento de Juan (1, 57).
En
el momento de la anunciación, María todavía no vivía con José. Si la
anunciación tuvo lugar en su propia casa y después ella se fue de prisa a
visitar a Isabel, probablemente volvió a su propia casa y no a la de José.
Lucas no especifica nunca cuándo María fue a vivir con José, aunque la presenta
viajando con él en 2, 5.
El cántico de María en repuesta al
cántico de Isabel da por terminada la saga de dos anunciaciones, que marcadas
por una intervención particular de Dios, definen el futuro de las próximas
generaciones. Isabel, en su breve cántico alaba a María Virgen, madre del Verbo
y madre de la humanidad… y María en su cántico más extenso, ha trasladado de
manera intacta y sublime (vv 34-35) esa alabanza a Dios. Antes de nacer Juan
Bautista y Jesús, la visitación hace que estas dos venerables mujeres corroboren
sus destinos, tal como lo había predicho el ángel.
¡Doxa en uyistoiV Qew kai epi ghV eirhnh, en anqrwpoiV eudokia!
|
BIBLIOGRAFÍA
El nacimiento del Mesías. Comentario
a los relatos de la infancia. RAYMOND E. BROWN. Editorial cristiandad, S.L.
Madrid 1982
El Nuevo Testamento y su mensaje. El
evangelio según San Lucas. ALOIS STÖGER.
Editorial Herder. Barcelona 1979
Comentario al
Evangelio de Lucas. RAINER DILLLMANN Y CÉSAR A. MORA PAZ. Editorial Verbo
Divino, 2006
[1]
Canticos con gran relación a los del A.T
donde se hace alusión de los triunfos de YAVÉ sobre los poderosos que
esclavizan a Israel: 1 Samuel 2, 1-11; Jueces 5, 1-31
[2] E.
DREWERMANN. Tu nombre es como el sabor de la vida. El relato de la infancia
de Jesús según el evangelio de Lucas: una
interpretación psicoanalítica. Barcelona:
Círculo de lectores - Galaxia Gutenberg, S.A., 1995,
p. 19.
[3]
Decreto de la PCB 26 de junio de 1912, Roma.
[4] EL NACIMIENTO DEL
MESÍAS: comentario a los relatos de la infancia. Escrito por RAYMOND
EDWARD BROWN. Pag 345
[5] No
es improbable que Lucas conociera el Libro de Judit, compuesto antes del 100 a.
C., probablemente en hebreo, y conservado en la tradición de los LXX.
[6]
Las alabanzas dirigidas por Isabel a María (VV. 42 a 45) dan a entender que la
Virgen es bendita especialmente por al FE que aportó al plan salvífico de Dios.
Tomando de: LA VERDAD, JESUCRISTO, SU IGLESIA Y EL HOMBRE. Pbro Filadelfo
Lopera, pag 701.
[7]
Señor es un título divino que se aplica a Jesús resucitado (Hch 2, 36; Flp
2,11), pero que Lucas lo utiliza desde su vida terrena.
[8] La
parte inicial del AVE MARÍA, se toma
de 1, 28. La segunda parte se toma de 1,42. Y el complemento que hacemos en
este rezo Santa María, Madre de Dios,
toma referencia en 1, 43.
[9]
Literalmente: hace grande, magnífica, como
en el Salmo 69, 31
[10] Anawim es el plural del hebreo anaw que, junto con ani significa pobre, humilde, afligido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario